Pajas Mentales

viernes, septiembre 29, 2006

Empezando con alegría

Lo del sentido del humor de Dios de aquel post, no lo decía gratuitamente. No sé si atribuirselo a él o simplemente a una evidencia empírica más de la ley de Murphy, pero, desde luego, hay circunstancias y situaciones que no sé muy bien a qué atribuirlas. Me parece que me voy a terminar comprando, o haciendo que me regalen, que se supone que es lo que se lleva, el santoral entero en forma de pulserita. De verdad, hay veces que a uno parece que le ha mirado un tuerto o un par de ellos porque si no no me explico como se me junta todo en las épocas que menos se me debería de juntar. Es que dan ganas de mandar al resto de la especie humana a paseo y encerrarse en el pequeño cubículo protector e hibernar.


¡Cuánto hay que aprender de la naturaleza y de los animalitos!
Pero como eso no lo voy a hacer ... pues nada, nada. La cabeza alta, el ceño fruncido y a hacer amigos, que no hay como estar de mala leche para que la gente venga con cualquier cuestión estúpida y pueril a tocarte los wevs. Y es que claro, no hay como tener dolor de cabeza para que a tu compañero se le ocurra ponerse a aporrear la mesa al ritmo (¿?) de Paquito el Chocolatero en Do menor. O ese día que estas jodido del estómago, y a tus amigos les apetecfe ¡oh, fatalidad! ir a comer al mejicano, y claro tú como eres un machote no vas a decir que no por un simple amago de úlcera. Y es que la convivencia es complicada... lo mejor ser autista y estar en una burbuja, lo malo es que así no puedes culpar de tus males a nadie... Y eso si que merece la pena, aunque sólo sea por lo que entretiene.